Parodiando a Eloy Romero
Dios es tan solo mi sombra
que me sigue mi costado.
como un amigo apreciado;
y protector que me nombra.
Y si acaso no le asombra
día vendrá que le asombre
que al faltarle ser y nombre
sin un nombre que lo apare
en desgracia él se declare
y no sea Dios ni un hombre.